La admirada porcelana de San Petersburgo
La porcelana de San Petersburgo, producida en la histórica Fábrica Imperial, ha sido un símbolo de lujo y calidad desde su fundación en 1744. Bajo el patrocinio de la emperatriz Isabel, esta fábrica fue clave en la producción de porcelana para la corte rusa, incluyendo servicios de mesa y objetos decorativos que aún hoy son admirados.
Origen de esta porcelana rusa
Fundada en San Petersburgo, esta fábrica de cerámica imperial produciendo pequeñas figuras y vajillas experimentales. Sin embargo, fue durante el reinado de Catalina la Grande cuando alcanzó su mayor esplendor, creando servicios como el famoso «Arabesque» y contando con la colaboración de artistas internacionales que llevaron la porcelana rusa a un nuevo nivel de refinamiento.
El período soviético y su influencia en la fábrica cerámica
Tras la Revolución de 1917, la fábrica fue renombrada como fábrica de porcelana Lomonosov y su producción se orientó hacia temas más revolucionarios y propagandísticos. A pesar de estos cambios, la calidad de la porcelana se mantuvo alta, y los artistas continuaron experimentando con nuevas técnicas y estilos, incluyendo el Art Nouveau y el estilo decorativo de rejilla azul, característico de San Petersburgo.